Fusiles automáticos y pistolas bañados con una pintura a imitación del oro, requisados en México al narcotráfico, reflejan el afán de las mafias organizadas por alardear de su poder y la ostentación que rodea sus vidas.
Los líderes del narco expresan su poder con armas lujosas con incrustaciones de piedras preciosas, como esta Colt, propiedad del narcotraficante mexicano fallecido Amado Carrillo Fuentes en cuyas cachas de oro llevan incrustados en cada uno de sus lados 322 circonias y 22 esmeraldas.
Un bimotor Pipe Navajo valuado en 230 mil dólares fue decomisado al narcotraficante colombiano arrestado en el 2007 Juan Carlos Ramírez Abadía, alias 'El Chupeta'. Como si de una película de mafiosos se tratara, uno de los líderes del cártel de la droga más poderoso de Colombia vivía rodeado de lujos en su residencia en Brasil.